Saber de ti cuando más te preciso
saber que estas aún en la distancia,
poder confiar el tu palabra cierta
que es a la vez caricia a mi tristeza
Pensar en ti mientras se va la tarde
y yo me quedo tan sola como siempre
y no querer ver como ante mis ojos
se va tambien el sol agonizante
Buscar el modo de ocultar el llanto
donde no llegan las miradas frías
de quien no sabe ni siquiera intuye
de como duele no poder alcanzarte.
Saber al fin que la noche llega
que todo ha de vestirse de nostalgia
y tu no estas, no llegarás entonces
y yo de nuevo sola con mi alma.
Pero en mi pecho duerme este te quiero
y vive para siempre ahora conmigo
callado y solitario entre mis ojos
y entre el suave cobijo de mis manos.
Lilian Elizabeth
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